Morelia, Michoacán a 18 de febrero de 2019.- Paulatinamente las temperaturas bajas comienzan a desaparecer para dar entrada a las condiciones cálidas, tal y como lo pronostica el Servicio Meteorológico Nacional en su informe diario.
En este sentido, la Secretaría de Gobierno exhorta a la población michoacana a mantenerse alerta por los cambios bruscos de temperatura, toda vez que por la mañana y la noche, prevalecerán las temperaturas bajas sin llegar a considerarse gélidas.
Ante estas condiciones que se presentarán en los próximos días, Protección Civil Estatal reitera las siguientes recomendaciones para hacer frente a los riesgos propios que traen consigo las altas temperaturas, tales como la gastroenteritis, diarrea y deshidratación, así como afectaciones en la piel y golpes de calor.
• Tomar abundantes líquidos y ofrecérselos a los niños para mantenerse hidratado
• No exponerse por tiempos prolongados al sol para evitar insolación y golpes de calor, en ese caos, utilizar bloqueador solar.
• Utilizar ropa y calzado ligero, preferentemente en colores claros
• Hervir el agua de consumo por lo menos durante 5 minutos.
• Desinfectar frutas, verduras y hortalizas
• Revisar que pescados, mariscos y carnes rojas estén frescos para evitar la intoxicación.
• Evitar en lo posible comidas y aguas frescas callejeras.
• Lavarse las manos antes de comer y después de ir al baño, o después de cambiar un pañal.
• Mantener ventilados los sitios de trabajo y el hogar.
• Dar especial atención a personas enfermas y de la tercera edad, niños e indigentes ante temperaturas altas
Asimismo, se pide a la población en general estar atentos a los siguientes síntomas:
• Piel roja, caliente y sin sudor.
• Pulso acelerado y fuerte.
• Dolor palpitante de cabeza.
• Mareo o náusea.
• Confusión o hasta pérdida de la memoria.
• Se contraen los músculos involuntariamente como en una convulsión.
• Ojos hundidos.
• Llanto sin lágrimas en niños
• Sed intensa.
• Labios y lengua secos.
• Irritabilidad.
• Fiebre.
• Vómito.
• Dificultad para respirar.
• Diarrea.
• Sed intensa.
• Evacuaciones o vómitos frecuentes.
• Sangre en las evacuaciones.
• No come o no bebe.
• Fiebre alta y persistente.
Al presentarse uno o más de estos síntomas, es altamente recomendable acudir al centro de salud o al médico familiar, evite auto medicar.