Esteban Salomón
En su segundo periodo al frente de la alcaldía de Morelia, Alfonso Martínez Alcázar sigue ofreciendo, como en la primera, pirita por oro, nada más que ahora es más descarado y agarró el slogan de “Morelia brilla”, pero no todo lo que brilla es oro.
Ese dicho o refrán le queda a pie juntillas a Alfonso Martínez Alcázar y su planilla de servidores suyos, o sus aduladores, como los quiera llamar, que le aplauden todo; todo sea por la chuleta, hasta perder la dignidad y se le cuadran.
Pues bien, más o menos lo que ese refrán quiere decir es que se debe tener cuidado con personajes que aparentan lo que no son, y en el caso de la administración de Alfonso Martínez Alcázar, y su séquito de aduladores, hay que mantenerse vigilante porque no es oro todo lo que reluce.
La administración de Alfonso Martínez Alcázar se ufana de tener la mejor policía, de tener transparencia en sus acciones y obras, de trabajar en pro de los habitantes de la capital michoacana, de ausencia de corrupción y demás virtudes que presumen y que sintetizan en su “Morelia brilla”.
Sin embargo, es sólo eso, una presunción porque la realidad los coloca en un sitio totalmente opuesto; la Policía de Morelia ha dado muestras de prepotencia, abuso de autoridad y corrupción; poco se hace por mejorar las condiciones de los morelianos; arrastra acusaciones de moches, de inflar las compras y las obras; de una opacidad que no da lugar al “Morelia brilla”.
El regidor Juan Manuel Parra desde hace tiempo había propuesto la creación de una comisión encauzada a trabajar el tema de la inclusión, de los derechos humanos y de la no discriminación. Esa propuesta la hizo, de acuerdo con fuentes bien informadas, en la época en que Juan Pablo Celis, titular de la regiduría, solicitó licencia.
Pues bien, ahora que Juan Pablo Celis se retiró definitivamente de la regiduría y Juan Manuel Parra retomó el cargo, valga la redundancia, retomó la creación de la comisión citada y para analizar ese asunto sostuvieron una mesa técnica en la que estuvieron la síndica Susan Melissa Vásquez Pérez y representantes de la regidora Minerva Bautista y del presidente municipal Alfonso Martínez Alcázar.
Hay que señalar que la comisión propuesta por Juan Manuel Parra busca atender, darle voz a grupos vulnerables o poco vistos por la administración como los adultos mayores, las personas con discapacidad o quienes forman parte de la diversidad sexual.
¿Y qué creen?, pues que el representante del alcalde Alfonso Martínez Alcázar, palabras más palabras menos, mostró su desacuerdo con una frase lapidaria, “se le está dando mucha atención a la diversidad sexual”.
¿En verdad la administración de Alfonso Martínez Alcázar le está dando mucha atención a la comunidad de la diversidad sexual?, yo no lo veo así, yo veo en la respuesta del representante del presidente Alfonso Martínez Alcázar –en la próxima les tendré su nombre- una falta de respeto y una discriminación total y absurda en un gobierno que tiene como slogan “Morelia brilla”.
Alfonso Martínez Alcázar sigue jugando con los morelianos y con su opaca administración ofrece, como la primera vez que fue alcalde, pirita por oro.