A favor de la vida se pronunció el diputado Humberto González Villagómez, al emitir un posicionamiento en el Pleno de la LXXIV Legislatura Local, sobre el aborto e hizo un llamado a que se redoblen esfuerzos para ampliar la cobertura de los programas de salud sexual y reproductiva, para prevenir embarazos no deseados.
En ese contexto, el diputado expresó la legalización del aborto se convierte en un método que parece moralmente aceptable y por tanto, como una opción posible que no es igualmente considerada allí donde no es legal.
Ante ese escenario, dijo, que debe ser una prioridad el fortalecer las políticas públicas sobre educación sexual como prevención de embarazos no deseados y evitar con ello, que más mujeres expongan su vida.
En nuestro país, puntualizó que se reportan más de un millón de abortos al año, y que la mitad del total de los embarazos son no planeados, es decir de un millón 900 mil, el 54 por ciento terminan en un aborto inducido, el 34 por ciento son en un nacimiento no planeado y 12 por ciento, corresponde al aborto espontáneo.
“No es extraño que la mujer -especialmente si es adolescente o joven- busque igualmente métodos abortivos clandestinos por la sencilla razón de que una ley, aunque quite la pena legal, no el deseo de ocultamiento u de sentimientos que les afecten”.
Por otro lado, es mentira el mito de que los abortos legales son más “seguros” que los clandestinos”, sostuvo el legislador.
Por lo anterior, consideró que antes de legalizar el aborto, se deberían cerrar filas en fortalecer desde todas las trincheras las políticas públicas en materia de salud sexual y reproductiva, para lo que se requiere incrementar los presupuestos públicos etiquetados a instrumentar modelos de atención preventiva y de atención integral.
Refirió que realizar un aborto genera riesgos como la muerte, cáncer de mama, cáncer de ovarios, hígado y cervical, perforación de útero, desgarros cervicales, placenta previa, recién nacidos discapacitados en posteriores embarazos, embarazo ectópico, afección inflamatoria pélvica y endometritis.
“El 49 por ciento de los jóvenes no utiliza ningún tipo de método anticonceptivo durante su primera relación sexual, además de que el 3.7 por ciento de quienes empiezan su vida sexual no utilizan protección por considerar que la sensación del coito es distinta”.
El diputado por el Distrito de Puruándiro, hizo mención sobre las grandes complicaciones más comunes que pueden darse durante la práctica del aborto, entre las que destacó: infección, efusión excesiva de sangre, embolia, desgarro o perforación del útero, complicaciones de la anestesia, convulsiones, hemorragia, lesión cervical y “shock” endotóxico.
Puntualizó que mueren más mujeres abortando que dando vida y dijo que la mayoría de quienes apoyan el aborto no han recurrido a practicárselo, “pues las mujeres que abortan, después son defensoras de la vida”.
Finalmente hizo un llamado a que se impulsen acciones integrales, a través de políticas de educación sexual serias y amplias hacia la población en todas sus franjas de edad, ya que solo se observan campañas temporales relacionadas principalmente al uso del preservativo o bien algunos esfuerzos de la iniciativa privada al respecto.