Quitarle 30 por ciento al campo afecta no únicamente al sector, sino a todos los mexicanos
Morelia, Michoacán 26 de septiembre de 2019.- De no corregirse la propuesta presupuestal 2020 para el campo, el país enfrentará la caída vertical de la producción agropecuaria y un marcado desequilibrio en la balanza comercial de este sector; disminución en ingresos de los productores rurales y deterioro del nivel de vida en el medio rural, lo que sería grave, indicó el diputado Eduardo Orihuela Estefan, al tiempo de exhortar a los diputados del Congreso de la Unión a reconsiderar el presupuesto para el campo mexicano.
El coordinador de los diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el congreso de Michaocán, exhortó también en tribuna al titular del poder ejecutivo a efecto de que, en la toma de decisiones públicas relativas al campo mexicano, considere, incluya y no descalifique, las aportaciones de las organizaciones productivas y sociales del sector agropecuario, forestal y pesquero.
En el exhorto que fue aprobado por el pleno, sostuvo que reconsiderar el presupuesto mencionado, sería en beneficio de la población más vulnerable y de la estabilidad social del país, ya que en la parte que reduce la asignación a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) de 65 mil 434.9 millones de pesos en 2019, a 46 mil 253.1 millones de pesos para el ejercicio fiscal del año 2020, que significa una disminución del 30 por ciento.
Asimismo, exhortó a que no cancele, elimine, ni afecte los programas productivos, esenciales para mantener el apoyo y la dinámica de la agricultura, ganadería y comercialización de cosechas.
El legislador indicó que se da la bienvenida a los programas sociales que contribuyen a superar las condiciones de pobreza y marginación, pero es necesario fortalecer esquemas de inclusión productiva. “Respaldamos el propósito expresado en el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2019-2024, cuando se afirma que el Gobierno Federal se ha propuesto como uno de sus objetivos romper el círculo vicioso entre postración del campo y dependencia alimentaria”, y por ende impulsar la autosuficiencia alimentaria y el rescate del campo. Por lo tanto, eliminar o reducir los programas productivos resulta contrario al PND y los compromisos asumidos por el Presidente de México.
Orihuela Estefan señaló que en los últimos años, el campo mexicano padece rezago en productividad y precios competitivos; inversiones escasas y malas temporadas de lluvias. Está urgido de inversiones; de infraestructura; de tecnologías orientadas al impulso del sector social y privado; y de financiamiento para los productores, de tal forma que no pierda la visión de futuro y el ritmo de producción, con fines de atención de necesidades y de generación de divisas derivadas de las exportaciones.
No obstante, agregó, el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2020, que entregó a la Cámara de Diputados el Titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público del Gobierno de México, prevé un decremento de 20,636 millones de pesos al Presupuesto del Programa Especial Concurrente (PEC), que involucra a trece Secretarías y Ramos Generales, con respecto al aprobado en 2019.
Esta perspectiva del presupuesto federal en el corto plazo, dijo, induce a la pobreza y a una mayor dependencia económica de los mexicanos; es insuficiente para el tamaño de las necesidades de inversión y de combate a la pobreza; pone en riesgo el valor de las exportaciones, y cancela posibilidades de sustentar bases para la autosuficiencia y seguridad alimentaria nacional. El contenido temático para el ejercicio fiscal del año 2020 privilegia la economía del subsidio social, castiga al sector primario y soslaya el desarrollo económico.
El mismo documento plantea que, en alto porcentaje el potencial de recursos fiscales se destine al gasto corriente, y olvida la importancia de la infraestructura, tanto en Agricultura y Desarrollo Rural, como en otras áreas, por ejemplo: la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y la Comisión Nacional del Agua, indicó Orihuela Estefan.
“En la bancada del PRI consideramos preocupante que se disminuyan los subsidios a inversión y productividad, derecho a la alimentación, comercialización, sustentabilidad y financiamiento. Estamos convencidos de que es indispensable realizar importantes adecuaciones que fortalezcan la reactivación económica, el mercado interno y el empleo, lo que exige incrementar la inversión fiscal productiva al campo. Que se ajusten drásticamente los mecanismos, pero no los presupuestos, porque ello podría significar el riesgo de pasar de un Estado mínimo a un Estado ausente e irresponsable”.
Eduardo Orihuela agregó que en un afán de ser constructivos y construir una Gran Alianza, la Confederación Nacional de Propietarios Rurales, en conjunto con dirigentes y comités ejecutivos de la Confederación Nacional Campesina, la Alianza Campesina del Noreste, la Confederación Agrarista Mexicana, así como con la Central Campesina Independiente, asumiendo como propia la consigna de “Por el bien de todos, primero los pobres”, presentamos un “Decálogo de propuestas” en torno al Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2020, a través del cual le pedimos al Presidente de la República, Licenciado Andrés Manuel López Obrador, congruencia entre sus dichos y hechos.
Los diputados priístas, finalizó tienen como prioridad en su agenda el fortalecimiento a la capacitación, la asociatividad, la tecnificación, la certificación y el fortalecimiento de la comercialización de los productores rurales michoacanos; donde se reconozca el valor del productor rural como un actor clave para el desarrollo económico de la entidad; se facilite el acceso a programas y apoyos de desarrollo a los productores; se gestionen recursos para el mejoramiento y rehabilitación de carreteras y caminos rurales; y, fomento a la venta directa de los productos, principalmente de los pequeños productores, con el objeto de disminuir o eliminar la participación de intermediarios.