La Revolución Mexicana no sólo implicó el sacrificio de millones de vidas humanas, sino que terminó destruyendo todos los pilares del pasado dictatorial y abrió las puertas al pueblo mexicano que había quedado marginado a lo largo de décadas. Eso declaró la coordinadora de los diputados del Congreso del Estado, Tere López Hernández, en el contexto del aniversario 109 de la gesta armada que cambió el rumbo de la nación.
Desde la óptica de la coordinadora de los diputados del Congreso del Estado, los ideales de la Revolución Mexicana como el combate a la pobreza, la corrupción, son las banderas principales de la Cuarta Transformación. “La Revolución Mexicana está más viva que nunca. Es el deber de todos los ciudadanos defenderla y profundizar su legado. No es tarea de un solo hombre, sino de todas y todos los mexicanos”.
La diputada Tere López consideró que no resulta exagerado comparar la actual administración federal con el movimiento armado. Argumentó que la cuarta transformación implica fortalecer el mercado interno, tratando de producir en nuestra tierra todo lo que necesitamos consumir.
“Además de que todos los ciudadanos puedan desarrollar una vida plena en el lugar donde nacieron, y solo aquel que migre que sea por voluntad y no por necesidad”.
La legisladora emanada de las filas morenistas destacó que los gobiernos neoliberales intentaron menoscabar los beneficios sociales que trajo la Revolución Mexicana. “Desde la administración de Miguel de la Madrid Hurtado hasta la de Enrique Peña Nieto, hubo un interés de imponer una historia alterna. Recuerdo que el entonces mandatario Vicente Fox quiso redimir la figura del dictador Porfirio Díaz. Ellos nunca han sentido orgullo por nuestra historia, se educaron en el extranjero y como consecuencia no les interesa defender nuestra soberanía. Sin embargo, fracasaron en su intento de destruir los íconos revolucionarios, los mexicanos tenemos muy arraigado en el inconsciente el valor que tuvieron nuestros héroes y heroínas”.