– Ausencia de un estado de derecho
– Regresan familias a sus hogares
– Encontraron comunidades destrozadas tendrán que reconstruirse de
– “Hay que convivir con el crimen organizado pero sin dejarse abrazar por él”
– Continua el fuego en límites de Coalcomán y Tepalcatepec
Morelia, Michoacán a 08 de octubre de 2021.- Resulta lamentable que ante la ausencia de un estado de derecho, sea un cartel del crimen organizado quien garantice “cierta seguridad, tranquilidad y transitabilidad” a familias que habitan en los municipios de tierra caliente que se han convertido en zona de guerra.
Así coincidieron en señalar los párrocos de Coalcomán y Aguililla, Jorge Luis Martínez y Gilberto Vergara García luego de que el primero de ellos diera el anunció de que “el cartel que controla la zona, les permitió a las familias que habían dejado sus patrimonios y pertenencias, regresar a sus hogares”.
Se trata de casi el 90 por ciento de las familias que por temor a las condiciones de guerra, habían emigrado a otros lugares; a su regreso encontraron sus comunidades y hogares destruidos y tendrán que reconstruirlas y trabajar por recuperar su patrimonio perdido, señaló Jorge Luis Martínez.
“Hay que convivir con el crimen organizado pero sin dejarse abrazar por él ahí el dominio es del cartel Jalisco”, añadió el párroco al manifestar que las familias encontraron no solamente destrozadas sus casas sino sus sembradíos, muertos muchos de sus animales, muchos desaparecidos; vamos a empezar una nueva vida”, dijo en su primera misa que ofició en la comunidad de Los Laureles en donde al margen del protocolo eclesiástico, permitió que los presentes hicieran referencia a sus dolorosas vivencias, sus emociones y pensamientos.
El fuego continúa:
Por su parte el Padre Gilberto Vergara García, párroco de Aguililla, precisó que el fuego y enfrentamientos aún continúa en los límites de Coalcomán y Tepalcatepec, “la guerra sigue; nosotros, ya recorrimos ese camino y ahora les toca a “las comunidades de los municipios vecinos recorrer”, manifestó.
Y añadió que, cuando el cartel Jalisco se extiende y después de que su límite de choque va más allá de las comunidades, se garantiza entre comillas cierta paz y de alguna manera pues se tiene ese respiro y que bueno que las comunidades puedan regresar a sus lugares, reagrupar a su ganado y, a sus tierras.
Sin embargo, añadió textualmente que, “esto no es el termómetro de una paz, esto sigue siendo el dominio de un grupo y el problema sigue estando en las fronteras y lo seguirá estando, así vamos a contemplar comunidades que están pasando por lo mismo que nosotros ya pasamos”.
En el mismo sentido consideró que dentro de la pena mayor, una buena noticia es que las familias ya pueden estar en sus lugares de origen en una relativa paz aunque la situación siga siendo grave.
Abundó también que, en Aguililla las fronteras siguen en conflicto y detalló que, “nosotros dependemos de Coalcomán y lo que pase en Coalcomán pasa con nosotros porque es nuestra vía, nuestro acceso de alimentos y demás por eso seguimos luchando porque las condiciones de nuestro municipio vayan mejorando; avanzamos a paso lento pero esperemos que nuestro paso vaya marcando lo que tienen que hacer otras comunidades”.
Se puede transitar con cierta libertad pero partiendo de Coalcomán ya que todavía no se restaura la comunicación con Tepalcatepec. En la zona limítrofe de los municipios de Coalcomán y Tepalcatepec, todavía está la tensión y no se permite transitar muchos menos habitar.